La adolescencia es una de las etapas de la vida más complicadas. En ella, los jóvenes empiezan un cambio en su personalidad, sintiéndose muchos de ellos vulnerables e inseguros respecto a sus amigos, su imagen, o su futuro.
Actividades extraescolares para adolescentes
Dentro de este contexto, muchos encuentran resguardo en realizar actividades que les conecten con sus amigos, y les ayuden a mejorar sus destrezas, tanto físicas como intelectuales y afectivas. El sentir que mejoran realizando una determinada actividad, supone un refuerzo crucial en su autoestima y les ayuda a explorar su identidad y mejorar su autoconcepto. Resulta muy importante en esta fase motivarles para explorar nuevos mundos y hacerles ver lo útil que puede resultarles de cara al futuro.
No deben ver este tipo de extraescolares como un martirio, sino como algo que les sirva para distraerse de su rutina de instituto. El tener libertad de elección (al ser ya mayores y poder tomar ciertas decisiones por si mismos) puede ser una opción ganadora para garantizar que la actividad que seleccionen les interesa.
De todos modos, para poder aconsejarles y darles ideas, aquí os dejamos unos ejemplos de actividades extraescolares que les pueden ayudar a desarrollar sus intereses, aficiones ¡y muchas cosas más!
¿Qué actividades deportivas pueden realizar los adolescentes?
En la etapa de la adolescencia, el desarrollo físico y emocional es crucial. Además de ser un momento de crecimiento personal, los adolescentes necesitan mantenerse activos para fomentar hábitos saludables que perduren toda la vida. Afortunadamente, existen una variedad de actividades deportivas que pueden satisfacer los intereses y necesidades de esta población en constante cambio.
- Deportes en equipo: El trabajo en equipo no solo promueve la cooperación y la socialización, sino que también brinda una oportunidad para desarrollar habilidades específicas. Desde el fútbol hasta el baloncesto, el voleibol o el hockey, los adolescentes pueden encontrar un deporte de equipo que se adapte a sus preferencias.
- Deportes individuales: Para aquellos que prefieren desafíos más personales, los deportes individuales ofrecen una excelente alternativa. El tenis, el atletismo, la natación, y el ciclismo son solo algunos ejemplos que permiten a los adolescentes concentrarse en su propio rendimiento y superarse a sí mismos.
- Actividades al aire libre: Explorar la naturaleza mientras se hace ejercicio es una opción muy atractiva para muchos adolescentes. El senderismo, la escalada, el kayak, y el surf no solo ofrecen un desafío físico, sino que también conectan a los jóvenes con el entorno natural, promoviendo la salud mental y emocional.
- Deportes de combate: Para aquellos adolescentes que buscan una forma de canalizar su energía de manera constructiva, los deportes de combate como el judo, el karate, el taekwondo o el boxeo pueden ser una excelente opción. Estos deportes no solo desarrollan habilidades físicas, sino que también fomentan la disciplina y el respeto.
- Actividades recreativas: No todas las actividades deportivas tienen que ser competitivas. El yoga, el baile, el patinaje, y el skateboarding son actividades recreativas que ofrecen beneficios físicos y mentales, además de ser una forma divertida de mantenerse en forma.
Ya sea compitiendo en equipo, desafiándose a sí mismos en deportes individuales, explorando la naturaleza, aprendiendo disciplina en deportes de combate o simplemente divirtiéndose con actividades recreativas, lo importante es que los adolescentes encuentren una actividad física que disfruten y que les permita mantener un estilo de vida activo y saludable.
Fútbol
Puede ser la más típica, pero no por ello deja de tener múltiples beneficios. Empezando por la salud, se destaca la mejora del sistema cardiovascular, de la coordinación y de sus habilidades motoras. Pasando al aspecto mental, se fomenta el trabajo en equipo y la unión y perseverancia hacia un objetivo común. Es vital que el profesional que les forme les inculque buenos valores como el juego limpio y la deportividad, sin dejar de lado el aprendizaje que supone competir y esforzarse. Es un ambiente óptimo para que conozcan gente con sus mismos intereses y de la que pueden aprender.
Inglés
Aprender inglés en la adolescencia proporciona una serie de beneficios significativos, incluyendo el acceso a una mayor cantidad de recursos educativos y oportunidades profesionales a nivel mundial, lo que amplía sus horizontes y aumenta su competitividad en el mercado laboral globalizado. Además, el dominio del inglés facilita la comunicación intercultural, promueve la cognición y la flexibilidad mental al aprender un nuevo idioma, y fomenta la confianza y la autoestima al permitirles interactuar con personas de diferentes culturas y contextos, fortaleciendo así su capacidad para adaptarse a un mundo diverso y en constante cambio.
Para motivarles a dar este extra en el inglés (ya que muchas veces se muestran reacios a realizar más horas de las que tienen en el cole) se les puede motivar con un viaje o una experiencia en otro país en el que tengan que demostrar las capacidades adquiridas desenvolviéndose de manera autónoma.
Teatro
Expresarse a través de esta actividad les ayuda a gestionar mejor sus cambiantes emociones. Además, serán capaces de desarrollar habilidades de comunicación, confianza y autoestima, así como el fomento de habilidades sociales y la creatividad. Actuar en el escenario les ayuda a mejorar su expresión verbal y no verbal, fortaleciendo su capacidad para relacionarse con los demás y trabajar en equipo. Además, el teatro les brinda la oportunidad de explorar su creatividad y empatía al interpretar diferentes roles y experiencias de vida, lo que contribuye a su desarrollo personal y social de manera integral.
Artículo recomendado: Actividades para niños tímidos e inseguros
Club de debate
Por último, una de las actividades que más de moda se están poniendo son los clubes de debate. Un club de debate para adolescentes ofrece una plataforma invaluable para el desarrollo de habilidades cruciales, como la comunicación efectiva, el pensamiento crítico y el trabajo en equipo. A través de la participación en debates, los adolescentes mejoran su capacidad para articular y defender sus ideas, al mismo tiempo que aprenden a escuchar y respetar las opiniones de los demás. Además, la investigación necesaria para prepararse para los debates promueve habilidades académicas sólidas, como el análisis de datos y la síntesis de información.
En última instancia, el club de debate cultiva una atmósfera de tolerancia y empatía, donde los adolescentes aprenden a apreciar la diversidad de perspectivas y a trabajar en colaboración para alcanzar objetivos comunes. En una sociedad cada vez más polarizada, en el futuro destacarán aquellas personas que sean capaces de escucharse entre ellas, debatir desde el respeto, y defender con argumentos de peso su modo de pensar.
Escoge las actividades que mejor se adapten a ti
Estos son algunos ejemplos que os proponemos, ¡pero hay muchas más!, la clave es encontrar aquellas con la que vuestras hijas e hijos se sientan libres de expresarse y motivados para aprender, mejorar, socializar, y en definitiva, conocerse a ellas/ellos mismos. Esperamos que este artículo os haya sido de utilidad. ¡Que tengáis buena semana!
¡No te pierdas nuestras actividades extrescolares en Madrid!
Redactado por: English Plus Actualización: 10/04/2024 Especialista en Enseñanza de inglés